domingo, 30 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (34)

Mismo día. Susana.. Te amo. Mismo día. Este mensaje tuyo no se puede borrar. 11.12. Buenos días mi chica maravillosa. Hoy viviremos nuestra jornada 30+3 de nuestra nueva vida y ahí va mi reflexión. La ecuación amor-dolor es necesaria, pero sólo hasta cierto punto, porque la primera obligación del amor es procurar la felicidad en el ser amado, y si no lo consigue, al menos evitar su sufrimiento.. Te quiero como nunca te he querido.

jueves, 27 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (33)

Mismo día. Susana La serenidad de la NER abraza nuestros corazones de llanto. Mismo día. TU VOZ. Tu voz me despierta, cristalina, alocada y risueña, como un manantial de Arrechea en primavera. Viene conmigo en la mañana, enlazando tus manos a las mías. Tu voz se hace terciopelo con el vino que bebo en la comida, y acaricia mi siesta con susurros de cariño. Tu voz me acompaña a media tarde al decir “te quiero” a mi hija y tiene una cena conmigo a la luz de unas velas titubeantes. Y cuando llega la noche, tu voz queda en silencio, porque son ya nuestros cuerpos los que toman la palabra.

miércoles, 26 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (31)

10.12. Susana. La NER se ha enfadado con sus dos habitantes adultos. Ella se pregunta por qué la habéis creado, amado... Si depende de una decisión para respirar, que sepáis que la NER ha aprendido ya a ser independiente y libre, porque ha absorbido todo el aire, de verdad, color, sonrisa, besos, fantasía. Que es ahora la que impone sus normas para entrar en ella. Así que decidíos, pues la NER tiene ya a sus dos niñas que saben lo que es amar. Mismo día. Salgo de tus brazos y me caigo en el precipicio de tu ausencia. Y sumido en la más profunda de las simas son tus ojos los que me ponen en el camino de vuelta hacia tus brazos. Y sólo te pregunto si puedo evitar la desazón de ese barranco para encontrarme siempre en el calor de tus labios. Aunque, cada vez que me pongo en la crisis es más dulce el reencuentro, y después de cada lágrima son más radiantes las sonrisas. Y cuando ya no me odias te amo más allá de lo que debo.

viernes, 21 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (30)

El mensaje alude a los mensajes de las “tres pes” –pongamos que me pongo en lo peor-. Son los siguientes: Pongamos que me pongo en lo peor 1. Apagaste mi luz, tan de repente, que dejaste mi luz entre tinieblas. ¿Podré descubrir algo real entre esas sombras? ¿O seguiré más bien persiguiendo retazos de ti en la negrura? Apagaste tu luz, tan de repente, y tú te has quedado a oscuras. Y en tus oquedades estoy yo, pero yo ya me he marchado a llorar tu recuerdo de esa noche, de tantas noches, a partir de ahora. ¿Dónde encontraremos la luz, en adelante? ¿Dónde me besarás con otros labios? ¿Dónde leerás mis palabras de amor con otras letras? ¿Qué otra chica me llevará en tu carroza de plata? ¿Quién te dará ahora mi fuerza maravillosa? ¿Quiénes harán nuestros viajes? ¿Quiénes renovarán nuestros abrazos? ¿Quién identificará el sabor de tus besos? ¿Qué chica se pondrá mis otras camisetas de Tintín cuando llegue el momento del descanso, del amor? ¿Con quién darás tus paseos en Izarra? ¿Quién me acompañará en mis caminos de Burguete? Has preferido la razón al corazón. Y yo he perdido la razón y no encuentro el corazón. Pongamos que me pongo en lo peor, que das por cerrada la NER, que deberemos reencontrarnos en otro espacio, será entonces un espacio sin formas, porque se ha apagado la estrella que nos permitió siquiera hace un mes alcanzar un cachito de felicidad. Pongamos que me pongo en lo peor número 2. A veces pienso que el mundo es una inmensa galería. Todos caminamos por ella con lámparas para iluminar la oscuridad. Hay lámparas para todos los gustos, las hay tan potentes que llegan hasta a cegar y no resultan útiles; otras proporcionan una luz muy tenue, pero alumbran convenientemente el corto espacio requerido por su usuario. Pero vamos a mi lámpara, no era la mejor de la galería, desde luego, pero yo creía que daba luz suficiente para mí camino y que te permitiría a ti ver también el tuyo, una vez hechos uno los dos. Pero me equivocaba. Mi lámpara era para ti como una pequeña estrella en el firmamento que servía “para decorar el prendedor” de Maite. una estrella de cuento, pero tan lejana como inútil. Y ahora que te vas y se apaga la luz de mi lámpara, soy consciente de ello. Apenas veo más que cuando la tenía encendida. Pongamos que me pongo en lo peor número 3. Era demasiado bonito para ser real, así que has preferido la realidad. “Una vez más se estrelló la barca del amor contra la vida cotidiana”, escribía el poeta Maiakovski. La mía no es siquiera una barca, sólo unas tablas dispuestas en la playa esperando a que alguien -¿tú y yo?- las armen para que se hagan a la mar. Ahora habrá que recogerlas, pues llega el invierno y las puede estropear. ¿Quién sabe si esas maderas podrán servir para que una barca se haga a la mar algún día? Pongamos que me pongo en lo peor número 4. Ella había anunciado visitarle a su casa de Burguete. Allí le comunicaría su decisión. Pero él se despertaba a las 4 y media de la madrugada y entraba en conversación con ella. “No voy a Burguete”, le dijo. “Supongo que tendrás tus buenas razones, pero no te voy a pedir que me las digas”, contestó él. Y a eso siguió una larga explicación de su historia de amor y de las dificultades que tendrían para encontrarse en un nuevo escenario. Él le pedía tiempo para eso, mientras ella escuchaba en silencio el desarrollo de sus ideas. Así que cuando ella le llamaba a las 8 para decirle que tenía fiebre y que no se podía acercar a su casa él ya lo sabía. Y cuando la voz de ella desaparecía de sus oídos él supo más cosas: que ella estaba nerviosa a consecuencia de una decisión dictada por su cabeza, pero su corazón se rebelaba y ordenaba al resto de su organismo a permanecer inmóvil. A estas alturas daba igual, el corazón había perdido definitivamente la guerra, sólo se permitía la leve satisfacción de ganar una escaramuza. Pongamos que me pongo en lo peor número 5. “Nadie te ha pedido que tomes una decisión. Puedes diferirla en el tiempo”, te digo. “Ya. pero es que entonces la NER puede crecer. Ya está creciendo sin necesidad de hacer nada de particular con ella”. No me dices nada, salvo que nuestro amor es imposible porque tu cabeza te dice que no debe desarrollarse. A estos mensajes de las tres pes debe sumarse el siguiente, escrito a continuación y que mantiene un registro semejante: LAS HORAS DE LA NER. Se dice que hasta el peor de los relojes marca correctamente la hora dos veces al día. Pues ocurre que el reloj de la NER marca hasta dos horas a la vez. Me dices que la NER es algo más que tú y que yo. Y tienes razón porque para ti es algo así como una ilusión que te permite escapar de tu tiranía cotidiana. Para mí la NER es un proyecto de vida. A ti te gustaría que la NER subsistiera en cualquier caso. Para mí, en cambio, la NER se desvanecería si el proyecto desaparece. Mi NER aguanta si la ilusión del proyecto sigue ahí, la tuya prescinde del proyecto y se aferra a la ilusión que la preside en todo momento. El problema es si es posible que la NER dé la misma para los dos al mismo tiempo, si existe un espacio temporal en el que nos podamos reconciliar con nosotros mismos en ese ámbito de amor que es la NER.

martes, 18 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (29)

10.12. La mañana del 30+1 él se levantó muy triste. A las cinco menos cuarto de la madrugada ella le había dicho que no iría a verle, que la NER amenazaba a su vida cotidiana y que había decidido acabar con ella. así que cuando ella le llamaba a las 8 para decirle que se encontraba mal y que no se podía acercar él ya lo sabía. Era verdad que él se había puesto en lo peor y que escribía desasosegadamente los mensajes de las tres pes –pongamos que me pongo en lo peor- pero de esa forma descontaba él parte de los devastadores efectos de su decisión. Y se lo dijo cuando desayunaba. Ella arrugó el ceño y quiso acompañarle durante su paseo. Cuando dejaron de hablar él se había reencontrado con la NER y alejado de sus peores presagios. En la comida le pidió que aflojara la tensión porque les hacía daño a los dos. Entonces a ella se le escapó un “te amo” que nunca antes había pronunciado. Más tarde, envueltos en la magia de la NER, definieron sus colores, su tejido y se contaron las historias disparatadas de un nuevo espacio mágico que ya era para ellos su nuevo “país de nunca jamás”, donde sólo los sueños se hacen realidad y la vida cotidiana siempre se bate en retirada. PD. Yo también te amo.

lunes, 17 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (28)

9.12. (SMS de Susana). La NER está enferma y se disculpa por no tener su encuentro soñado. Te quiero. Mismo día. Gracias, mi chica maravillosa, por la llamada que me ha acompañado en el final del paseo y por tu simpatía y tu cariño. Y como estoy harto de escribir mensajes tan tristes que no soy capaz de enviarte, te voy a formular UNA PETICIÓN FORMAL. Como quiera que la inminencia de tu decisión nos impide conciliar el sueño, te da fiebre y a mí me pone muy triste y más cosas, no parece que tenga esta demasiados efectos benéficos. Así que te ruego que difieras “sine die” la misma y que sea lo que Dios y la Virgen de Roncesvalles –en cuyos dominios me encuentro- quieran. Es gracia que... y que además estoy legitimado para pedirte porque TEE QUIEEROO.

viernes, 14 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (27)

Mismo día. “Hay que nadar hacia la esperanza”. (Rossana). Mismo día. Esta tarde he tenido una conversación con la Virgen de Roncesvalles. Le he pedido que sea posible algo parecido a lo que sigue: “Te quiero mucho, aunque te suene a lo de siempre. más que una amiga eres una maga, diferente. Andar a saltos entre el tráfico, leer a medias el periódico, , colarnos juntos en el autobús, cantar hasta quedar afónicos. Viviendo juntos. Juntos. Amor para dos, amor y buena compañía. Juntos. Un día entre en dos, parece mucho mas que un día. Juntos. Café para dos, fumando un cigarrillo a medias –esto último, como no sea un “porro”, me parece un tanto difícil-. Vivir entre dos, diciendo a los problemas adiós. ¡Figúrate! Dos locos sueltos en plena calle. La misma cama y un bocadillo a media tarde. Y tú eres así, ¡qué suerte que ahora estés junto a mí!

miércoles, 12 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (26)

El mensaje a que se alude en este nunca fue enviado. Lo transcribo a continuación: “1h 12m 53s es la expresión cabalística del callejón sin salida en el que estoy hasta que tú tomes tu decisión. 1 12 53 es lo que ha durado nuestra conversación de esta tarde. ¿Y dónde están las claves de tu criterio? Debo decir que no lo sé, que no te conozco como tú dices conocerme. Creía que sabía leer en tu corazón –todavía lo creo- y esas letras expresan que estoy ahí, en tu corazón, ocupando un espacio muy importante además en él, pero hay tantas susanas que aún no conozco. Quedan pliegues en ti que no podría descubrir sin tu ayuda. Me dices que todavía no has tomado tu decisión, pero que sólo te quedan horas. Estoy confuso, carezco de referencias. Me dices que a lo mejor no es una decisión absoluta, que en alguna medida dependa de mí. Entonces te contesto que sea cual sea tu decisión, la respetaré, y que aceptaré tus circunstancias personales, y tú que por qué me pongo en lo peor. Cuando sólo quería decir que te quiero con todas sus consecuencias, que te seguiré a pesar de todo eso, que el amor no quiere compartir terreno con otros, pero que a veces no hay más remedio si lo que se quiere de verdad es amar. Hoy no he sabido explicarme, me han faltado las palabras –he sido un parlamentario de pacotilla cuando me he medido contigo. Te digo que no puede ser siempre así –de torbellino- nuestra relación. Y tú que sí, que no te importaría buscarte otro trabajo, plantar árboles en Arrechea para fabricar mermeladas con sus frutos. ¿Significa eso que te vas a venir a vivir conmigo? No lo sé. Hoy sé que no sé nada, salvo que te quiero –suena ahora una canción, ¡qué casualidad!-. Y me dices que vendrás a verme pasado mañana con tu decisión tomada y que si estoy dispuesto a escucharla. Te digo que sí, que supongo que es algo que hay que saber. Y sigues diciendo que cualquiera que sea tu decisión yo seré feliz. ¿Me estás diciendo que te quedarás conmigo? Los franceses dicen “touché”. He reconocido que he perdido por goleada. Hasta ahora he creído que tenía controlada –más o menos- la situación. Pero hoy me has convertido en un juguete tuyo, en una especie de jorgito de felpa, con el que puedes hacer lo que quieras. Y si el jueves es la fecha, ¿por qué hay otras fechas? ¿por qué no sabes si me vas a ver el sábado? ¿por qué me dices que conoceré a tu hija el 13 D? ¿Por qué me dices que no vas a celebrar la Navidad? ¿es que ya no vas a tener pareja? ¿Y por qué me felicitas la navidad? ¿es que a lo mejor la vas a pasar conmigo? O, puestas las cosas al contrario, ¿por qué me contestas a mi carta que siente al perfume y al olor de las flores, que no es tan fácil lo que pido y me pones triste y provocas otro mensaje en el que reclamo tu sonrisa? 1 12 53 es, en definitiva, un acta de rendición sin condiciones por mi parte. Ya puedes hacer conmigo lo que quieras.

lunes, 10 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (25)

8.12. En la mañana de hoy, nuestro primer mes, te envío mi beso más grande, y pisoteado ampliamente por tu superioridad, aunque con el orgullo incólume, recurro al poeta que le hacía un soneto a ese pie. Te ruego que memorices el último verso: “Por tu pie la blancura más bailable, donde cesa en diez partes tu hermosura. Una paloma sube a tu cintura, baja a la tierra un nardo interminable. Con tu pie vas poniendo lo admirable del nácar en ridícula estrechura, y a donde va tu pie va la blancura, perro sembrado de jazmín calzable. Ya tu pie, tan espuma como playa, arena y mar, me arrimo y desarrimo, y al redil de tu planta entrar procuro. Entro, y dejo que el alma se me vaya por la voz amorosa del racimo. Pisa mi corazón, que ya es maduro”. (Miguel Hernández).

viernes, 7 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (24)

Mismo día. Mi queridísima Susana. tras la zurra dialéctica que me has infligido en la tarde de hoy me he quedado sin palabras y las que he escrito después no sería prudente que las leyeras antes del jueves. Tomo prestados los versos del poeta que se dedican a unos ojos como los tuyos, en los que me sigo refugiando. “Tus ojos me recuerdan las noches de verano, negras noches sin luna, orilla al mar salado, y un chispear de estrellas, de un cielo negro y bajo. Tus ojos me recuerdan las noches de verano, y tu morena cara los trigos requemados, de un suspirar de fuego de los maduros campos. Tus ojos me recuerdan las noches de verano. De tu morena cara, de tu soñar gitano, de tu mirar de sombra, quiero llenar mi vaso. Me embriagaré una noche, de un cielo negro y bajo, para cantar contigo, orilla al mar salado, una canción que deje cenizas en los labios. De tu mirar de sombra, quiero llenar mi vaso. Tus ojos me recuerdan las noches de verano”·. (Antonio Machado).

miércoles, 5 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (23)

7.12. Estoy triste. Contagiada de tu amor mi tristeza se mira en el espejo de la tuya. Cuando te digo “te quiero” abro una herida en tu corazón, y si no te lo digo se abre otra en el mío. Y me pregunto: ¿Puede un amor que se siente correspondido hacer tanto daño? Ya ves, son paradojas de la vida, cuchillos dolorosos que nadie clava conscientemente. Y voy en pos de otras respuestas. ¿Podría tu sufrimiento evitarse? Llegaría a jurar por lo que más quiero –por mi hija, por ti misma- que no otra cosa pretendo, aunque ahí están los resultados, y sin embargo permíteme que lo siga intentando. Por eso hoy más que nunca –quizás mañana vuelva a mí el optimismo-, porque hoy estoy triste y necesito tu sonrisa...

lunes, 3 de junio de 2013

NER. Mensajes cruzados (22)

6.12. Todos hablan sobre mí, pero no puedo escuchar sus voces, sólo sus ecos en mi cabeza. La gente se para a contemplarme, pero no me fijo en sus miradas, sólo en la sombra de sus ojos. Quiero dejar los vientos del norte, muy lejos de la lluvia, e irme adonde el sol brille y el clima se adapte a tu ropa. Me gustaría contar contigo para ese viaje, montados en una carroza de plata, que se parece a una estrella. (Nillson para “Midnight cowboy” y Fernando Maura para Susana NER).